La violación de estudiante en Facultad de Derecho a manos de un líder juvenil perteneciente al movimiento de Morena desató una espiral de inestabilidad en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí que está forzando la renuncia del rector Alejandro Zermeño y la eventual toma de la máxima casa de estudios por parte de incondicionales del auto nombrado padrino Ricardo Gallardo Cardona.
Al paro general de labores en escuelas y facultades, ahora se suman resoluciones de Suprema Corte de Justicia de la Nación, que desecharon tres amparos, dos juicios de nulidad y una controversia constitucional, que había promovido el rector Alejandro Zermeño para evitar auditorías del Instituto de Fiscalización Superior del Estado, dirigido este último por un incondicional del Gobernador Ricardo Gallardo. Inmediatamente, el titular del instituto Rodrigo Lecourtois López se apresuró anunciar sanciones para funcionarios universitarios que podrían incluir multas económicas e inhabilitaciones.
Mientras el auto nombrado padrino cierra las pinzas para que caos se apodere de la máxima casa de estudios, los estudiantes, en su inocencia política, continúan recabando e ingresando pliegos petitorios en cada escuela y facultad. El tiempo corre a favor de Gallardo y en contra de la comunidad universitaria.









