LA FIESTA DE LOS IDIOTAS

Editorial

Pablo Méndez

Cuando en imágenes observaba al presidente de Venezuela Hugo Chávez, con un montón de funcionarios a sus espaldas, hombres y mujeres, algunos entrados en años, me preguntaba qué clase de personas eran éstas, que son capaces de aceptar y realizar tareas y, creer ideas, que destruyen a su país.

Me preguntaba qué tipo de seres humanos eran. Al día de hoy no entiendo qué los movía y, los mueve ahora, hacer lo mismo en administración de Nicolás Maduro.

El problema es que esa misma imagen la vuelvo a ver durante mañaneras de López Obrador, en México. Un montón de hombres y mujeres, algunos también de edad avanzada, validando, haciendo, ejecutando o promoviendo actos demenciales, a sabiendas de que lo son.

Qué tipo de personas son esos funcionarios, algunos de edad avanzada. Algunos laureados por su reconocida, hasta antes del año 2018, capacidad intelectual.

Incluso, varios de esas mentes brillantes, que fueron corridos del gabinete y humillados por López Obrador, han sido vueltos a reclutar por Claudia Sheinbaum. Ellas y ellos dicen, creen, que ahora sí, con Claudia, será diferente.